Vivimos momentos complicados en los que nuestra sociedad necesita de la solidaridad de todos nosotros. Y es por eso, que desde nuestra Cofradía queremos sumarnos a esa solidaridad aportando nuestro granito de arena en la elaboración de equipos de protección para todas aquellas personas y colectivos que hacen posible que podamos atisbar un haz de luz al final del túnel.

Son muchos los nombres solidarios, pero desde nuestra Cofradía hemos querido ayudar económicamente a la adquisición del material necesario para la elaboración de pantallas faciales de protección, a Carlos Martín Gutiérrez. Un humilde vecino de nuestra querida Medina de Rioseco, que de forma altruista está proporcionando éste tipo de protección tan necesaria en estos momentos, a diferentes colectivos de nuestra ciudad y provincia.
Cuando llegó a nuestros oídos que no estaba recibiendo ninguna tipo de apoyo económico, nos vimos en la obligación de tenderle la mano como agradecimiento ante tal acto de humanidad.

Cómo Cofradía, cómo Hermandad, debemos de dar ejemplo ante la sociedad e intentar ser el espejo de aquellos que todavía no acaban de entender un mundo sin rencores, un mundo con diversidad de opiniones, en definitiva, un mundo en el que todos nos tendamos la mano ante cualquier adversidad.

Nuestra pequeña aportación ha servido para que lleguen pantallas protectoras a la Residencia de Ancianos Sancti Spiritus y Santa Ana (30), supermercado La Plaza del Dia% (20), supermercado Lupa (17), supermercado Dia% (13), supermercado Clarel (3), ambulancias Ambuibérica (5), estancos (3) y otras 50 más a varios colectivos de Valladolid (Hospital Río Hortega, Hospital Clínico, Guardia Civil, policía municipal, ambulancias, residencias de ancianos y casas de beneficencia). Pero por encima de todo, agradecer a Carlos su iniciativa, su humanidad y sobre todo su solidaridad para con los demás.
Gracias.